Hace 8 años vinieron a mi consulta un matrimonio de la franja de Huesca con dos niños de unos 7 años. Uno con rasgos mediterraneos y otro eslavos. Éste era Kiryl de Bielorusia, quien fue acogido durante todos estos 8 veranos por una família Española.
Kiryl es de la zona de Chernobil y su mamá biológica hace 25 años cuando explotó la central nuclear recibió una importante cantidad de radiación. La señora comió los vegetales y la carne de la zona, esto le produjo que cuando al cabo de unos años quedó embarazada, tuviera un niño precioso pero con una alteración en su extremidad inferior. Kiryl tenia una pierna más corta, un pie más corto con solo 4 dedos.
Cuando lo vi con su familia de acogida ya sentí una empatia con estos señores. Recuerdo que a este matrimonio les dije que yo solo tenia dos niñas y que me lo quedaria en aquel momento. Recuerdo la respuesta de los padres: primero nos lo quedamos nosotros y luego hay un montón de cola.
Cada verano lo he visitado y le he realizado una plantilla para mejorar sus apoyos. El niño me traia dibujos y fotos suyas que aún guardo.
Durante el año vive con otros niños como él en una casa de acogida en Bielorusia. Habla perfectamente el castellano y otros idiomas que ha aprendido en el colegio. Lo he visto crecer durante todo este tiempo. El dice que tiene un papá (el de Huesca), tres mamás (la biológica, la Bielorusa y la de Huesca), un hermano de Huesca y no recuerdo cuantos Bielorusos.
Este verano como cada año ha venido a visitarse, pero antes de partir para Bielorusia vino a despedirse ya que por su edad no podrá volver el proximo año. Me hizo un regalo precioso. Este reloj y esta placa dedicada y escrita en su idioma. Me ha hecho mucha ilusión. A su padre de acogida y a mi se nos saltaron las lágrimas
Esto me da que pensar: hay gente muy buena.
Mucha suerte Kiryl, te la mereces crack. Ha sido un honor poder ayudarte.